Todos tenemos claro que la familia es un referente primario y fundamental para cada persona. El núcleo donde se refuerza y se da confianza a cada uno de sus miembros. Donde el niño mediante sus juegos, se identifica primero con él mismo, después con su familia y más tarde con el mundo. La familia es uno de los pilares del desarrollo de la personalidad de cada uno de nosotros.
Esos días de los que os hablo, me descubro maldiciendo mi frenética y ocupada existencia y pensando que mis hijos ¡mis queridos hijos! a veces superan mis límites. Una vez serenados los ánimos, me invade un persistente sentimiento de culpabilidad, pues observo que mantengo el mismo nivel de exigencia con los niños que el que yo tengo conmigo misma, y que, inconscientemente, proyecto diariamente sobre ellos mis ansiedades, preocupaciones, el cansancio e incluso los fracasos. Lo comento con mi marido y él tiene la misma sensación.
Por ello en cada familia debe existir un espacio y un tiempo dedicado al juego. Es cierto que el tiempo de trabajo y estudio, el invertido en las actividades extraescolares y el destinado a otras obligaciones, hacen que las familias dispongamos cada vez de menos tiempo libre, pero ¡tenemos que buscarlo, y por supuesto, encontrarlo!.
Ahora bien, hablar de tiempo de ocio tanto familiar como individual, no supone hablar del sistema de ocio que se nos impone. No se tata de consumir ocio. Se trata de acceder a un ocio creativo y generador de riqueza para la persona. Juegos en los que la familia pueda comunicarse, conocerse y respetarse; en los que cada miembro sea apreciado por lo que es y significa, que nos ayuden a relajarnos, a disfrutar y a aprender unos de otros. Pero, ¿quién no ha terminado pasando, sin más, una tarde de ocio en la consabida hamburguesería? ¿o vagando como posesos por el típico centro comercial?.
¿Realmente disfrutamos jugando en familia con nuestros hijos? ¿Dedicamos un tiempo para el juego en familia? ¿Elegimos los juguetes apropiados para la edad y personalidad de cada hijo? ¿Somos conscientes de la importancia del juego, de los juguetes?
